Venezuela es ejemplo en el Continente en cuanto al desarrollo de sistemas operativos libres. El Proyecto Canaima es un ejemplo, diseñado ciento por ciento en el país.
El software libre, desde que nació, “se propagó por todo el mundo”, así lo aseguró el gerente de Políticas, Planificación y Normalización de la Comisión Nacional de Tecnologías de Información (Conati), Carlos Parra, en una entrevista ofrecida a Conatel.
Parra conversó sobre los beneficios de las tecnologías de información libres y el avance que registra Venezuela en este campo tecnológico. En 1999, realizó su primer curso sobre software libre. “Yo estudié electrónica inicialmente, pero digamos que me especialicé en el área de sistemas de formación, de informática”.
Ese mismo año comenzó a trabajar en la Administración Pública y comenta que, en aquel entonces, “las plataformas de datos eran muy obsoletas, muy antiguas. Entonces, en la evaluación de qué nuevos sistemas se podían incorporar, casualmente estaba surgiendo el software libre, sus primeras distribuciones como Slackware, Debian, y algunas academias empezaron a dar cursos aquí en Venezuela, en Caracas”.
¿Por qué le interesó el software libre, qué bondades ofrece?
“Como estudié electrónica y sabía de sistemas, fui programador durante mucho tiempo. Los sistemas basados en software libre dan una ventaja sobre los privativos, y es que te proporcionan el código fuente, es decir, las líneas que escribieron los programadores para que ese sistema funcione. Cualquiera que sabe programar tiene curiosidad por saber qué dice esto, qué líneas lo hicieron, qué sentencias utilizaron, cómo lo estructuraron”.
Parra explicó que los sistemas avanzados que proporcionan el código fuente son “un caldo de cultivo para todo programador que le guste investigar y aprender, saber cómo están hechas las cosas, esa es la primera motivación; mientras que los sistemas privativos solamente permiten su uso. Por mi parte, prefiero el que me permite más que usarlo. El privativo tiene costos, tienes que pagar por la licencia, el otro lo bajas libremente de Internet.
Al respecto, Parra aclaró que no todos los programas de software libre son gratis, “pero sí todos los software libres están disponibles desde Internet”.
¿Cómo define usted el software libre, cómo se lo explicaría a alguien que no maneja el tema?
“El software libre es tecnología compatible con la humanidad, porque tiene un principal basamento filosófico que es compartir el conocimiento. Esas líneas de código (fuente) que me proporciona son conocimiento puro, y el conocimiento es un derecho humano.
“Ningún ser humano puede desarrollarse sin conocimiento, ningún país puede desarrollarse sin conocimiento, ningún pueblo puede surgir si no se apropia de un conocimiento y lo comparte, lo explota y utiliza para su propio beneficio”, Carlos Parra, gerente de Políticas, Planificación y Normalización del Conati.
Parra insistió en que el conocimiento y su liberación es compatible con el desarrollo de la humanidad. “El conocimiento es libre, es un derecho, y nosotros, los seres humanos, tenemos derecho al conocimiento”. Asimismo, añadió que cuando alguien privatiza ese conocimiento elimina la posibilidad de compartirlo. “Eso es egoísta”, enfatizó.
“Desde chiquitos nos enseñan en casa a compartir los juguetes, pero resulta que ya grande si tú aprendes a programar y trabajas en una empresa como Microsoft, entonces te dicen: no, no, no, vamos a vender esto para que la gente lo use”, refirió.
¿Cómo avanza Venezuela en el desarrollo del software libre?
“Hemos recorrido mucho más de lo que parece, aquí adentro creemos que nos falta mucho, nos preguntamos por qué no hemos migrado, por qué no hacemos más. Pero resulta que, en Argentina, Venezuela es un ejemplo”.
Parra comentó que en un viaje reciente a Argentina, muchas personas especialistas en el área le comentaron que Venezuela está mucho más adelantada en tecnologías libres que el país sureño. “Los argentinos dicen que se leen nuestros decretos, nuestras leyes, incluso cómo está hecho el Proyecto Canaima para poder ellos hacer el suyo”, sostuvo.
En ese sentido, recordó que el Decreto 3.390, de fecha 23 de diciembre de 2004, firmado por el entonces presidente Hugo Chávez, fue la primera iniciativa legal en el mundo que impulsa el uso de programas de Software Libre desarrollados con estándares abiertos. “Ningún Presidente, de ninguna República, había firmado un decreto para establecer que las empresas públicas deben migrar al software libre”.
Hecho en Venezuela
“El Proyecto Canaima es uno de los sistemas operativos de software libre diseñado ciento por ciento en Venezuela, con recurso humano nacional y con las ganas de un pueblo de ser soberano tecnológicamente”. Parra coordinó el proyecto durante cinco años y aseguró que mucho antes de Canaima, la Universidad de Los Andes (ULA) promovió un sistema basado en software libre y llamado Ulanix.
“Ellos (ULA) vienen antes de Canaima y han investigado mucho al respecto. De hecho, ese sistema se puede adaptar para las universidades”, expresó Parra, quien también aseveró que en el territorio nacional han surgido otros sistemas basados en el software libre. “Hablo de sistemas operativos, porque software libre hay muchísimas aplicaciones, y miles se han desarrollado en Venezuela”.
Canaimas hechas en casa
Venezuela avanza significativamente hacia la construcción de las piezas que componen una computadora Canaima. Actualmente los componentes de las máquinas portátiles que son entregadas a los estudiantes provienen de Portugal y se ensamblan con talento venezolano en el complejo tecnológico Simón Rodríguez, en La Carlota, Caracas.
Parra recordó que los acuerdos que firmó el Comandante Chávez con el Gobierno de Portugal en 2008, incluyendo aquellos en materia de telecomunicaciones, incluyeron unas cláusulas de transferencia tecnológica. “Gracias a estas clausulas, Venezuela logró que el Proyecto Canaima Educativo dejara de importar máquinas para tener hoy una industria ensambladora de computadoras portátiles llamada Industrias Canaima”, puntualizó.
Creación libre
Franklin Rincón es programador de sistemas, trabaja de forma independiente, forma parte de la Comunidad de Software Libre y su área de trabajo es el sector telecomunicaciones. “Desde 2006 estoy trabajando en la plataforma del software libre”, comentó en declaraciones ofrecidas al equipo de prensa de Conatel.
“La Comunidad de Software Libre es un movimiento sin fines de lucro en el que todos sus integrantes aportamos nuestro granito de arena. Para hacer cosas mejores, todos somos líderes, todos queremos hacer lo mejor, construir juntos una mejor plataforma”, aseveró.
Rincón defendió que “Venezuela ha apoyado el desarrollo de nuevos pensadores, entendiendo que se pueden lograr cosas interesantes con el uso del software libre, con beneficios económicos para el país”. Por último, indicó que su sueño es formar a niñas y niños en la materia, y así impulsar la programación de sistemas a partir del software libre.
Fuente: Conatel